La propuesta más fácil: LA GUERRA SUCIA.

Diciembre 12, 2015

A poco días del inicio de la campaña electoral a Gobernador del nuestro estado de forma extraordinaria, es importante y necesario lograr analizar y reflexionar el voto, debido a que para la mayoría de los colimenses la expresión que mencionan es… “otra vez”, efectivamente, nuevamente tenemos la oportunidad de poner en manifiesto nuestro derecho, obligación y toma de decisión por el proyecto que más nos convenza, identifique y/o convenga.

Lo anterior, desafortunadamente se convierte en una opción compleja, ya que pareciera que la GUERRA SUCIA es la mejor propuesta y es evidente que si funciona, debido a que el argumento negativo perdura, contrario al argumento y acción positiva, mismo que se duda; ¿incongruencia? Sí, lo es, los ciudadanos queremos un candidato auténtico, recto, fiel a su ideal, corazón caliente y sensible, capaz de generar propuestas, con el atrevimiento de cambiar lo que siempre ha sido igual y ya no es funcional, que no le importe los colores, que su objetivo principal sea la justicia social.

Es así como el deseo del votante es defraudado al ver espectaculares vulgares, vergonzosos, prevaleciendo la oscuridad, la falacia, el ataque, jugar con la ignorancia política de la gente y lo más penoso, vemos que no hay propuestas suficientes hasta el momento que genere un voto consciente.

Con la anterior, me atrevo a decir que es lamentable que la guerra sucia, sea lo que hoy marca la campaña electoral extraordinaria y más lamento la manipulación de la gente a través de la identificación de una necesidad económica. Estoy convencido que la persuasión se debe de basar en decir la verdad, sin engañar a la gente, sin desilusionarla al mediato o inmediato tiempo, debido a que falsear tanto genera los movimientos masivos, el descontento social, la guerra verdadera del ciudadano hacia con el gobierno.

Es por eso, que espero que los candidatos se enfoquen ser congruentes, sencillos, centrados, objetivos, sensibles, empáticos y completamente verdaderos.

MIGUEL ANGEL SOLIS RAMIREZ